miércoles, 14 de mayo de 2008

Antonio Guzmán Blanco. Biografía

Antonio Guzmán-Blanco (Caracas, 28 de febrero de 1829 - París, 28 de julio de 1899) fue un militar, estadista, y político venezolano, presidente en tres ocasiones (1870 - 1877, 1879 - 1884, y 1886 - 1888). Se le conoce como el "autócrata civilizador", “el ilustre americano”, “el regenerador y pacificador” y otros títulos otorgados en su honor o deshonor por la gente de su tiempo. A pesar de sus cerca de veinte años de absolutismo y corrupción, se le considera como modernizador de Venezuela porque construyó numerosas edificaciones públicas, mejoró la economía y el clima de relativa paz con que se desarrollaron sus gobiernos.

Hijo de Antonio Leocadio Guzmán, fundador del Partido Liberal, estudiaba Derecho en la Universidad Central de Venezuela. Desempeñó su primer cargo público como jefe de sección en la Secretaria de Relaciones Exteriores. En 1854, ingresó a las logias masónicas caraqueñas Concordia y Esperanza, y Sociedad de María. El 1 de marzo de 1856 se recibió como licenciado en derecho civil, y el 14 de abril siguiente obtuvo el título de abogado. Ejerce cargos diplomáticos ante los Estados Unidos de Norteamérica. En agosto de 1858, al poco tiempo de su regreso a Venezuela, Guzmán Blanco fue acusado de participar en un movimiento conspirativo contra el gobierno de Julián Castro llamado La Galipanada. Fue arrestado y sometido a un juicio pero resultó absuelto. Sin embargo, esto no evitó que el 18 de septiembre de 1858, Castro ordenara su salida del país. Tras evadir a las autoridades, protestó por escrito ante las autoridades judiciales y la Convención Nacional reunida en Valencia, alegando que aunque había sido declarado inocente por los tribunales todavía se le quería desterrar. A pesar de esto, fue desterrado el 8 de enero de 1859.
Llucha con el bando liberal en la Guerra Federal y luego de su victoria, en
1863, forma parte del gobierno de Juan Crisóstomo Falcón. Es testigo de la Revolución Azul, contra el presidente Falcón, y líder de la Revolución de Abril, para reponer en el poder a los liberales.Guzmán-Blanco vivió muchos años en París y otras ciudades europeas y percibió muchos de los cambios que se produjeron durante el siglo XIX. Por otro lado, Guzmán-Blanco es acusado de ser un caudillo y hacer política de una forma muy personal.Reconocido miembro de la masonería, debilitó el poder de la iglesia católica en Venezuela, al pasar al Estado funciones que tradicionalmente eran realizadas por ésta, creando las instituciones del registro civil, la educación pública, el Panteón Nacional promovió la instauración del culto a los héroes de la guerra de independencia que se han mitificado al punto de ser una especie de religión de Estado que aún existe en Venezuela. Los 3 períodos en los que gobernó Guzmán Blanco son conocidos como el Septenio (1870-1877), el Quinquenio (1879-1884) y el Bienio (1886-1888), aunque éste último no lo completó. Durante los 18 años que Guzmán se mantuvo en el poder, se implementaron importantes medidas orientadas a hacer de Venezuela un estado moderno.
El
1 de agosto de 1999, luego de haberse cumplido un siglo de su fallecimiento, sus restos son llevados al Panteón Nacional.

Culminación del período


El primer período de Guzmán Blanco culmina y accede al poder el general Linares Alcantara. Este inicia el movimiento antiguzmancista y provoca que unos de los partidarios de Guzmán, el general Gregorio Cedeño, inicie un movimiento llamado Revolución Reivindicadora en 1879. Dicho movimiento coloca a Guzmán Blanco en el poder nuevamente.

Culmina su período nuevamente, caracterizado por las protestas estudiantiles. Durante la presidencia de Crespo se intensifican las mismas, pero a diferencia de Linares Alcantara, Crespo las controla con ciertas medidas. Para lograr que Guzmán Blanco volviera al poder inicia el movimiento conocido como “Aclamación”, nombre con el cual se comienza a conocer el tercer y último período de este.

Gobierna durante dos años más, a partir de 1887 hasta 1889. Pero luego de culminado su período se retira definitivamente del poder, yéndose a vivir a Europa. En ese momento el poder recae en las manos del general Hermógenes López. Estos dos años guzmancistas estuvieron caracterizados con la disipación del hábito de guerra en la población y que se perdiera el interés en convertirse en revolucionarios y por consiguiente, en propiciar una revolución. Así que se puede decir que hubo una paz casi absoluta.

Oposición al gobierno

Luego de que Guzmán Blanco le cediera la presidencia a uno de sus tenientes más allegados, Francisco Linares Alcántara, y que se fuera a Europa, este lo traiciona y propicia un movimiento anti-guzmancista en el que se dieron acciones violentas, como la demolición de todas las estatuas de Guzmán Blanco. También se derogaron todos los decretos promulgados por el expresidente.

Posteriormente hubo alzamientos por parte de los estudiantes, durante la primera presidencia de crespo. Las protestas tenían su origen en ciertas medidas educativas que afectaban a las Universidades aprobadas por Guzmán Blanco. Estos disturbios fueron controlados por Crespo con cárcel y la clausura de la Universidad.

A partir de su tercer período, el bienio o “Aclamación” hubo más alzamientos, ocasionados debido a que durante este período no se respetaron los derechos humanos, hubo confiscaciones, contribuciones forzosas y otras medidas que ocasionaban descontento; y sobre todo estuvo lleno de corrupción administrativa y peculado. Los alzamientos también se dieron por parte de caudillos regionales, los cuales fueron sometidos poco a poco.

Pero esto no fue todo. Mientras gobernaba tuvo que luchar contra un movimiento de desacuerdo por parte del general Matías Salazar, y en 1874 contra la oposición armada de varios de sus allegados (José Ignacio Pulido y León Colina).

Decretos y leyes

Durante su gobierno, se puede considerar que el decreto más importante de Antonio Guzmán Blanco es el Decreto de la instrucción pública.
Promulgada el
27 de junio de 1870, el Decreto de Instrucción Pública, pone la responsabilidad de la educación popular en manos del Estado, con lo cual se completa "la figura jurídico-educativa del estado docente, que comenzó a formarse desde los comienzos mismos de nuestra república". Mediante este decreto divide a la educación del venezolano es dos etapas: la primario o universal, que la Ley exige a todos los venezolanos y que los Poderes Públicos están en el deber de dar gratuitamente; y la instrucción libre o voluntaria que comprende los demás conocimientos que los venezolanos quieran adquirir en las demás ramas del saber humano.
Para controlar la aplicación de él,
creó una estructura administrativa constituida por la Dirección Nacional de Instrucción Primaria, adscrita al Ministerio de Fomento; y Juntas Superiores en las capitales de Estado; Juntas Departamentales en las cabeceras de Departamento; Juntas Parroquiales en cada parroquia; Juntas Vecinales en los pueblos y caseríos. Al margen de tales organismos y para colaborar con ellos de modo directo y estrecho, funcionarían, además, Sociedades Cooperadoras constituidas por todas aquellas personas que quisieran prestar protección a la instrucción primaria.
Sin embargo, también promulgó otros decretos y leyes, por medio de los cuales realizó acciones como:
  • La creación del bolívar de plata como unidad monetaria nacional (31.3.1879)
  • La declaratoria oficial del Gloria al Bravo Pueblo como himno nacional (1881)
  • La realización del II Censo Nacional
  • La introducción del servicio telefónico en la línea Caracas-La Guaira.

Asimismo, una vez apartado del gobierno, desde mediados de 1887 hasta julio de 1889, concentró Guzmán sus esfuerzos diplomáticos en la solución del conflicto de Venezuela con Inglaterra por los límites de la colonia guayanesa, planteando al Gobierno británico que la frontera se fijará en el río Esequibo.

Avances culturales. Obras públicas realizadas


De su gobierno resaltan la creación de la moneda moderna (el Bolívar), la instauración del himno nacional, el segundo censo nacional, la creación de la Gaceta Oficial, el Antiguo ferrocarril entre Caracas y La Guaira, la fundación de la Academia Venezolana de la Lengua, el servicio telefónico entre Caracas y La Guaira, fomento a la agricultura y a la educación (Decreto de Instrucción Pública y Obligatoria de 1870), estímulo al comercio, e importantes obras públicas entre ellos el Panteón Nacional, el Palacio Federal Legislativo, Teatro Municipal, el Parque El Calvario, el Templo Masónico de Caracas, la Basílica de Santa Teresa, la Santa Capilla, la estatua ecuestre del Libertador en la Plaza Bolívar, la Plaza El Venezolano así como las fachadas del Palacio de las Academias y el Palacio de la Exhibición, Palacio Arzobispal de Caracas y la Iglesia de San Francisco entre otras edificaciones y obras civiles.
En tal sentido, otras principales obras de gobierno del guzmancismo figuraron:
la realización del II Censo Nacional; la instalación de la Academia Venezolana de la Lengua en 1883. Mejoró la red de carreteras, ferrocarriles, líneas de navegación, correos y telégrafos. Estableció el sistema métrico de pesas y medidas y fundó un servicio nacional de estadísticas. Hizo levantar mapas, censos e inventarios de la nación, y de esta manera, estableció una economía, si no floreciente, al menos estable.

Conflictos con la iglesia


Durante el Guzmancismo, el conflicto entre la iglesia y el poder civil se incremento, ya que Guzmán Blanco trato de separar las atribuciones del estados y las de la iglesia tomando algunas medidas. Entre ellas podemos mencionar:
1. Creación del registro civil y del matrimonio civil, a través de los cuales se prohibió la realización de bautizos, matrimonios y actas de defunciones que no fueran registrados previamente por las autoridades civiles.
2. Suspensión de las primicias o pagos que los fieles daban a la iglesia por las ceremonias religiosas e incautación de los cementerios.
3. Suspensión de los conventos de monjas.
4. Expropiación de templos y extinción de los seminarios.
5. Elimino la religión del pensum de estudios.

Estas medidas provocaron un enfrentamiento entre el Estado y la Iglesia, ya que las mismas fueron rechazadas por las autoridades eclesiásticas, como el Arzobispo de Caracas, Silvestre Guevara y Lira y el Obispo de Mérida, Juan Hilario Bosset. Desde entonces, las iglesias y el clero lanzaron una campaña contra el Gobierno, y en muchos lugares los sacerdotes se pusieron a favor de las tropas azules.
Al no lograr una solución al problema, Guzmán Blanco amenazó al Papa Pío IX con crear una "Iglesia Nacional" en Venezuela separada de Roma y la cual tendría como autoridad religiosa suprema el Jefe de Estado. Esto obligó al Papa a negociar con el gobierno. Así nombró al Arzobispo José Antonio Ponte y puso fin al conflicto con esta designación.

Períodos de gobierno. Características


1. Septenio (1870-1877): El general Antonio Guzmán Blanco, exiliado en Curazao, prepara un movimiento contra el gobierno de José Ruperto Monagas, hijo de José Tadeo, ambos encumbrados al poder por la Revolución Azul. El 27 de abril de 1870 sus fuerzas toman Caracas y derrocan al gobierno de los Azules. Es el máximo líder de los liberales. Triunfante la Revolución de Abril, como es conocida, inicia su primer gobierno, el Septenio (1870/1877), con una dirección clara: eliminar lo viejo, inútil y contrario al progreso, y sentar las bases legales y materiales del porvenir. Busca la paz y la modernización del país dentro de un esquema político fundamentado en su liderazgo personalista y en la aplicación de fórmulas centralizadoras sin abandonar el discurso federal.
Mientras domina a los Azules, apoyado por caudillos como Francisco Linares Alcántara, León Colina, Matías Salazar, José Ignacio Pulido y Venancio Pulgar, pone en orden la administración, reforma la legislación, y le cambia la cara a Caracas. En esto también difiere de los gobiernos anteriores, que cuando hacen la guerra no gobiernan. Guzmán entiende las prioridades de su gestión y les da curso sin dilaciones: educación pública; reorganización de la hacienda pública; obras públicas; estadística; abolición de los peajes, del impuesto a las exportaciones y de los bienes de manos muertas; redención del censo eclesiástico; fomento de la inmigración.
La pacificación del país exige tiempo, recursos y decisiones; vencidos los Azules en 1871, los caudillos liberales, antes sus aliados, insurgen contra Guzmán. A unos los derrota en batalla, a otros los gana con halagos y en un caso, el de Matías Salazar, termina fusilándolo. Su concepción personalista del poder se refuerza en los homenajes que le rinden sus acólitos en conocimiento de su debilidad ante los halagos: el Congreso le confiere el 19 de abril de 1873 el título de “Ilustre Americano Regenerador de Venezuela” y Caracas erige imponente.


2. Quinquenio (1879-1884): Este período de 5 años consistió la segunda oportunidad de ejercer el poder de Antonio Guzmán Blanco. Luego de la denominada Revolución Reivindicadora tomó el poder el 26 de febrero de 1879.

Revolución Reivindicadora
Este movimiento surgió luego de la muerte de Francisco Linares Alcántara y tuvo como objetivo devolver el poder al "Ilustre Americano", Antonio Guzmán Blanco. Se inició el 28 de diciembre de 1878 en la localidad de Valencia, estado Carabobo. A la cabeza de este movimiento estaba el General Gregorio Cedeño. El gobierno de Caracas pus resistencia ante esta arremetido liberal; sin embargo fueron derrotados en la batalla de la Victoria, el 6 de febrero de 1879, que produjo una capitulación en la cual se respetaba la vida de los firmantes. El 13 de febrero de ese mismo año, las tropas libertadoras entraron a Caracas y siete días más tarde, el 21 de febrero, Guzmán Blanco llegó al país y días más tarde tomó el poder por segunda vez.
Así se da inició al período conocido como el Quinquenio.

Durante este período se desarrollaron políticas de construcción de ferrocarriles, para las cuales se firmaron contratos para la construcción de ferrocarril Caracas - La Guaira y el Valencia - Puerto Cabello. Estos contratos eran costosos para la Nación, ya que establecía 99 años para los contratistas y una garantía fija del 7% sobre la inversión. Si se diera el caso de que no se llegara a este porcentaje, el Gobierno debería pagar la diferencia. En 1880 el Telégrafo era uno de los servicios más importantes que prestaba el Estado a sus ciudadanos; existían estaciones en Caracas, Ña Guaira, Petare, Los Teques, entre otros. Esta herramiento no sólo era eficaz para las comunicaciones, sino además era una manera de control político que ejercían los funcionarios del gobierno.
Para el año 1883 el teléfono estaba comenzando sus pasos en Venezuela; La empresa norteamericana Inter-Continental Telephone Company pisió el ejecutivo permiso para instalar unos aparatos telefónicos de prueba.
Dicha innovación fue muy popular y para enero de 1884 fue inaugurada la primera línea telefóni Caracas -
La Guaira.
Ca
be destacar que durante esta época la minería tuvo un auge, ya que se agregaron a los productos de exportación. El cobre y el oro incremetanron su producción con el desarrollo de los ferrocarriles.
La finalizar el segundo gobierno de Guzmán, el país estaba inmerso en una profunda crisis económica causada por la baja en los precios del café.


3. Bienio (1886-1888): Para ese momento fue propuesto por el presidente Crespo al terminar su período. Se trata de un movimiento orquestado en la cúpula, que denomina La Aclamación Nacional. Los publicistas afectos al Gobierno hacen que Guzmán Blanco (ausente entonces en Europa) sea incluido en la nómina del Consejo Federal. A la postre es electo para el bienio 1886-1888 y toma posesión el 15 de septiembre de 1886. Ahora modifica el estilo que lo había distinguido anteriormente, ya que en lugar de manipular el escenario para el ejercicio de un influjo directo e inmediato, mueve las piezas con el objeto de dirigir el gobierno por interpuesta persona, mientras permanece en el extranjero. Su regreso coincide con el mejoramiento de la actividad económica y con el aumento de valor de los títulos de la deuda pública, circunstancias que aprovecha para presentarse como superdotado en la solución de los problemas surgidos durante el mandato de Crespo. En principio, continuó los programas de obras públicas con el énfasis del Quinquenio. Así, por ejemplo, adelanta los trabajos del ferrocarril Caracas-Petare y la línea férrea de la capital hacia Antímano; hace construir en Caracas el puente del Guanábano y funda la Casa de la Moneda con equipos modernos de acuñación. Durante el Bienio, la oposición se vuelve más audaz y los antiguos partidarios de Guzmán Blanco se dividen o se apartan de él. Un crítico importante a su gestión es, en 1887, el periódico El Yunque, publicado por un grupo de idealistas pertenecientes a las nuevas generaciones que habían fundado el Partido Nacional Democrático, el cual se autocalificaba de «partido de la juventud». Entre ellos estaban Tomás Ignacio Potentini, Luis Correa Flínter, José Mercedes López y Eduardo O'Brien, redactores o colaboradores de aquel periódico, cuya divisa era «Paz y Leyes», a la cual agregaban un pensamiento de Víctor Hugo: «El presente es el yunque del porvenir». Los continuos y despiadados ataques de aquellos muchachos y sobre todo, el interés con que el público esperaba cada día la aparición del periódico, acabaron por
exasperar al presidente, que mandó detener a algunos de los redactores y posteriormente, al continuar la publicación, fue ésta suspendida legalmente, aunque circularon algunos números en la clandestinidad. A mediados de 1887, Guzmán Blanco no parece interesado en mantenerse mucho tiempo en el ejercicio directo del mando.

Por consiguiente, no acepta una proposición de Crespo en el sentido de turnarse sucesivamente los 2 jefes en la presidencia. Guzmán Blanco rechaza la proposición de una sociedad bicéfala y exclusiva. Prefiere orientarse hacia la búsqueda de un candidato civil para el próximo período y a la selección de un lugarteniente que cubra su ausencia hasta el final del Bienio. En suma, escoge al general Hermógenes López con el objeto de que lo sustituya hasta las postrimerías del período. Entonces resuelve marcharse a Europa y así lo hace el 11 de agosto de 1887. Como en buena medida el éxito del proyecto modernizador descansa en el influjo inmediato de su persona, poco a poco comienza a descoyuntarse cuanto edificó durante 18 años. Por lo pronto deja un émulo poderoso, el general Joaquín Crespo y un grupo de políticos civiles cuya ambición es el poder, sin dependencia de los factores tradicionales del Liberalismo.